Ayer fue el cumpleaños de mi hijo Alonso...
Su priméra década...
y yo lo pasé casi sin hacerle caso, trabajando e intentando terminar a tiempo los regalos y adornos de un cumpleaños que no era el suyo...
Creo que no ha sido el mejor día de su vida, a pesar de los caramelos (comprados a primera hora de la mañana camino hacia el cole porque a su madre se le olvidaron el día de antes), de su sobresaliente en francés, de sus pasteles, de su nuevo belen de figuras que tanto quería y su arbol rojo, de la visita de sus mejores amigas, de su pizza favorita ...
Este fin de semana, que tan pronto se nos ha echado encima, no tendrá tampoco su fiesta con los amigos, porque como él ha dicho a quiénes le llamaban: este no, que "tenemos" mucha taréa...
A veces me pregunto si estaré perdiendo el norte.
Y pocas veces me respondo que no.
Ahora mismo estaré viajando hacia Madrid, hacia el este, para entregarlo todo... el sol de cara y la pena a la espalda...
a los amigos de quedada y otros: ahora ya sabéis por qué no os dejé comentarios, pero sabed que tiempo al tiempo...
Buen fin de semana para todos.
mart a.
pd: esto de arriba lo escribí anoche que me podían los remordimientos...
hoy ya me he levantado de otra guisa, que lo que hay es lo que hay...
y estoy deseando enseñaros el resultado del cumpleaños que hemos preparado...
hasta el lunes!!!!
