eso mismo debieron pensar los miles y miles de turistas que el domingo nos juntamos para ver Madrid...
todos los años hay que ir a ver las luces, los escaparates, el ambiente...
este es un resumen del día...
un día bastante gris, por cierto, y con bastante lluvia...
Catedral de La Almudena
la Plaza Mayor, con sus puestos de abetos y de belenes...Chennnnchoooo!!!!
las calles adyacentes con sus maravillosas fachadas...
La Posada del Peine, uno de los hoteles más antiguos de Madrid...merece la pena pinchar en su página para verlo porque no es cómo uno espera...
este reloj....me suena!
el ombligo de España
las luces, que no llegamos a ver encendidas (llovía y salimos en estampida....)
Las Cortes
y el monumento más visitado en estas fechas... que colas más interminables
Y, por supuesto, yendo con tantos niños...
La casa de Perez, Ratón Pérez
CORTILANDIA
y mientras empezaba el espectáculo...
El Corte Inglés, otra tradición para los de provincias.
Los niños a los juguetes...yo, mientras, a lo mío.
Y si hay algo que me gusta, es encontrarme por casualidad con lugares cómo estos...
o cómo encontrarse a Le Pain quotidien
y sobre todo, sobre todo, encontrarme sin esperarlo el hotel URBAN...
Que ganitas te tengo.
y su restaurante Europa Decó, con el chef Joaquín Felipe a la cabeza
y a su bar, el Glass Bar...
pero diluviaba, los niños estaban cansados y ya era hora de regresar a casa...
Ya queda menos para que llegue el día en que yo diga: Urban, allá voy..
marta a.